La solitaria protesta de un vendedor africano contra un Intendente
Se trata de un vendedor ambulante que está radicado en 9 de Julio. Los inspectores del balneario de Los Toldos le prohibieron ejercer su actividad porque decían que no residía en el municipio. El hombre protestó a los gritos, tirándose al piso y hasta intentó autoflagelarse. Luego fue detenido cuando irrumpó en los carnavales e intentó tomar el micrçófono para decir que era discriminado. Finalmente, el africano realizó un reclamo en la puerta de la Municipalidad.
Un vendedor ambulante de origen africano protagonizó un verdadero escándalo al intentar ejercer du actividad en el balneario de la localidad bonaerense de Los Toldos, donde suele vender anteojos, bijouterie y palos para sacarse selfies. Como el hombre está radicado en 9 de Julio, las autoridades municipales le comunicaron que no podía vender dado que existe una ordenanza vigente que no permite la venta ambulante a personas que no tienen domicilio en el distrito.
Desde el municipio indicaron que durante enero, al hombre lo invitaron a retirarse del balneario en reiteradas oportunidades por encontrarlo vendiendo sin permiso, sin embargo, el vendedor tuvo una insólita reacción al querer ser echado. De acuerdo a lo que informó el medio local Democracia, el africano comenzó a los gritos, se arrojó al suelo y comenzó a golpearse, llamando la atención de todos los turistas presentes. En ese contexto, denunció que estaba siendo discriminado.
Según publicó ese medio, el escándalo tuvo lugar durante una jornada donde se desarrollaban los festejos por el carnaval, cuando el vendedor se puso a trabajar en el espacio no permitido. Cuando los inspectores municipales le pidieron que se retire del lugar, el vendedor ambulante comenzó a autoflagelarse e incluso intentó subir al escenario para hablar utilizando el micrófono.
Como consecuencia de los disturbios, el vendedor fue detenido y su mercadería quedó secuestrada. Una vez en libertad, el africano se dirigió hasta la Municipalidad para reclamarle a Franco Flexas con un cartel que rezaba: "Señor Intendente necesito por favor que me devuelvan las cosas y me voy. Estoy durmiendo en la plaza. No tengo para comer, necesito ayuda". Finalmente, este miércoles el hombre se retiró del lugar.