Un joven de Balcarce corrió 158 km pidiendo ver a su hijo adoptivo
Osvaldo Vignolio corrió desde Balcarce a General Guido pidiendo que la justicia de Dolores le restituya al niño que él y su esposa criaron durante casi dos años. El nene había sido abandonado con 16 meses de vida en el Hospital Materno Infantil de Mar del Plata, donde estaba internado por los maltratos físicos de su madre biológica. Denuncian abuso de autoridad de una jueza.
El balcarceño Octavio Vignolio corrió 158 kilómetros para reclamar por su hijo del corazón, del que fue separado hace más de un año. Fueron tres días de maratón que empezó en Balcarce y terminó en General Guido, donde el joven lloró abrazado a su esposa y su hermano Alejandro, quien lo acompañó todo el recorrido.
Octavio Vignolio y Victoria Balda, en abril de 2014 tomaron contacto con un niño que solo tenía 16 meses de vida, se encontraba internado en el Hospital Materno Infantil de la ciudad de Mar del Plata, a donde había llegado desde Villa Gesell en grave estado debido a maltratos físicos provocados por su madre biológica.
Por intermedio del Servicio Local de Villa Gesell, Octavio y Victoria conocieron al bebé al que nadie visitaba. Los autorizaron a verlo completar el recorrido durante cinco días hasta que le dieron el alta. Finalmente los Vignolio volvieron a Balcarce con Titi y la promesa de una guarda con fines de adopción.
Después del fracaso de una revinculación con la familia biológica, la jueza de Familia de Dolores, Verónica Polchowski, autorizó a que puedan adoptar al menor pero al poco tiempo cambió su decisión y optó por entregar a Titi a una familia de General Guido e impuso una restricción de acercamiento para los Vignolo.
"Llama la atención que todos los políticos que han tenido acceso al caso expresan que la jueza Polchowski actuó mal, que se cometieron toda clase de irregularidades, abuso de autoridad y lo más terrible es que nunca se tuvieron en cuenta los Derechos del Niño", señalaron desde la familia al diario LaCapitalmdp.