Río Paraná: El agua está en el nivel de emergencias
Las lluvias del fin de semana llevaron al pico de creciente del Paraná, que se ubica en los 3.50 mts., a diez centímetros del alerta de evacuación. La Provincia decretó alerta hídirico para la región. Hay familias de islas autoevacuadas y algunas que esperan el rescate de Defensa Civil y Prefectura.
Finalmente, la amenaza de creciente del río Paraná se hizo realidad en la costa sampedrina y la zona de islas. Producto de las copiosas precipitaciones del fin de semana, el agua alcanzó los 3.50 metros, a escasos diez centímetros del pico considerado límite para las evacuaciones masivas dispuestas por el Instituto Nacional del Agua y la Prefectura local.
Defensa Civil, Prefectura Naval y Cruz Roja recorrieron la zona de islas en embarcaciones chicas aportadas por vecinos, de alta velocidad, para establecer acciones inmediatas donde sea necesario, rescatar a quienes ya se encuentran con sus hogares anegados y relevar necesidades de los que aún tienen alguna porción de tierra que los hace permanecer en sus viviendas.
El agua de arriba
Las lluvias caídas el fin de semana fueron excesivas para lo esperado, alcanzando en apenas dos días los niveles que se registran en un mes.
El sábado, Gobernador Castro tuvo 68 milímetros de lluvia; Río Tala, 50; Pueblo Doyle y Santa Lucía 95 mm, cada una; Colonia Vélaz 90; San Pedro 60.
En todo el partido se registró un promedio de 140 milímetros entre sábado y domingo, lo que produjo problemas de anegamiento en algunos barrios, como el San Francisco, donde la calle frente al Centro Integrador Comunitario quedó prácticamente convertida en una laguna.
Lo mismo sucedió en la zona de la rotonda del camino Crucero General Belgrano, donde producto de las obras que se están realizando, algunas casas se vieron estropeadas por la inundación que se produjo en el lugar.
El agua de abajo
El Paraná mantiene un ritmo sostenido de creciente desde hace algunos meses, cuando los productores ganaderos despertaron el alerta para evacuar sus animales ante la presencia del agua en los campos donde pastan sus animales.
En la zona de islas ya hubo varias familias que decidieron autoevacuarse ante la amenaza de que el agua ingrese en sus casas, cosa que por estos días, también producto de la lluvia, sucedió en diversos sectores.
Marcelo, un habitante de Lechiguanas, cuya vivienda está ubicada hacia abajo de lo que se conoce como la Vuelta del Sur, esperaba ayer junto a su esposa y sus tres pequeñas hijas el momento de ver una barcaza que colabore con ellos para dejar la isla.
La espera se realizaba en el techo de la casa, cuyo interior ya fue ganado por el agua. “No nos queda ni una porción de tierra”, relató a La Opinión de San Pedro desde el techo del baño de la casilla que habita con su familia. “El agua ya tapó todo, nosotros estamos acá, esperando, tomando un poco de sol”, bromeó Marcelo calmada la desesperación por rescatar la mayor cantidad posible de cosas de su inundado hogar.
Hay otras familias de islas cuya situación es apremiante y eran atendidas ayer por Defensa Civil. En el caso de que haya que evacuar más personas, se dispondrá el Centro Integrador Comunitario en el barrio San Francisco como lugar de emergencias.
Prefectura dio inicio al Plan de Inundaciones en etapa de Alerta. Dispuso medios fluviales y terrestres para asistencias de urgencia. “Estamos en condiciones de salir ni bien lo requieran desde islas o la zona ribereña”, explicaron desde la dependencia naval local.
Defensa Civil monitorea la situación en el barrio La Tosquera, donde hay seis viviendas en riesgo de evacuación que, en caso de ser necesario, serán trasladadas a la escuela del barrio. Ya hay dos familias que reciben atención municipal en una vivienda ubicada frente al cementerio local y otras tantas que se autoevaluaron trasladándose a viviendas de parientes.
Entre las familias en riesgo de ese barrio se encuentra una compuesta por un matrimonio y sus seis hijos que se niegan a salir del terreno que ocupan, a pesar de que el agua ya ganó el interior de la casa. Recorren tabién la zona del Bajo Tala, donde hay algunas casas que podrían estar en condiciones de ser evacuadas.
Emergencia hídrica
El Gobierno provincial, a través de un decreto firmado por Daniel Scioli, la Ministra de Infraestructura Cristina Alvarez Rodríguez y el titular de economía, Alejandro Arlía, estableció la emergencia hídrica para 68 de los 135 distritos de la provincia de Buenos Aires, entre ellos San Pedro y toda la región del noroeste bonaerense, ubicado a orillas del Paraná.
La decisión se tomó “considerando las intensas lluvias acaecidas en el sur de la provinciaa de Córdoba y Santa Fe, además de las locales, han provocado el anegamiento en la mayoría de los partidos noroeste”, según dice el texto del Decreto.
La medida habilita la asignación inmediata a los damnificados por parte del Ministero de Infraestructra “mediante acciones concretas y prestaciones que morigeren la situación que los aqueja".
La emergenia hídirica fue declarada por el término de un año a contar desde el 25 de enero, momento en el que está fechado el decreto publicado ayer en el Bolettín Oficial.
En San Pedro aún no recibieron notificación alguna y desde el Gobierno municipal informaron que “la Provincia está al tanto de nuestra situación, porque hemos elevado varios informes desde el cinco de enero previendo lo que iba a pasar, proyectando lo que había que hacer”, explicó el Secretario de Gobierno y representante municipal en la Junta de Defensa Civil Juan Almada.
También habían elevado informes sobre la fuerte tormenta que anegó el barrio El Sapito, en Río Tala, donde debieron disponerse obras de urgencia para evitar mayores problemas.
En la Municipalidad aseguran que el Comité de Emergencia de la Provincia “no tiene ni idea de lo que pasa” en esta y otras ciudades del interior. “Llaman para preguntar si está todo bien con la tormenta y acá el problema es la creciente”, se quejaron a la vez que destacaron el gasto ocasionado por la situación en la compra de colchones, frazadas y alimentos, y la falta de apoyo en ese sentido por parte del Gobierno Provincial.
Además de San Pedro, Baradero, Campana, San Nicolás y Zárate, todos ubicados en la ribera del Paraná, la medida incluye a la mayoría de los municipios del conurbano, y los distritos de Alberti, Arrecifes, Bradgado, Capitán Sarmiento, Carlos Casares, Carlos Tejedor, Carmen de Areco, Chacabuco, Chivilcoy, Colón, Exaltación de la Cruz, Florentino Ameghino, General Arenales, General Pinto, General Rodríguez, General San Martín, General Viamonte, General Villegas, Leandro N. Alem, Lincoln, Luján, Nueve de Julio, Pergamino, Rivadavia, Rojas, Saladillo, Salto, San Andrés de Giles, San Antonio de Areco, Suipacha y 25 de Mayo.
La tormenta y los animales
El fuerte temporal del fin de semana provocó destrozos y problemas en muchos sectores del partido, especialmente en la zona rural, donde las tormentas eléctricas generaron situaciones preocupantes.
En Pueblo Doyle el sábado por la noche se quemó un generador de potencia utilizado para tareas rurales cuyo costo no es sencillo de reponer.
En diversos puntos de la ciudad hubo quejas por electrodomésticos quemados y bajas de tensión en la noche de la tormenta, amén de que hay puntos donde aseguran que la tensión no supera en ningún momento los 200 volts., bastante menos por debajo de lo normal.
En un feed lot ubicado en el acceso a Santa Lucía un rayo mató siete animales de los que allí se alimentan para comercializar. Es la tercera vez que una tormenta eléctrica se cobra la vida de hacienda en ese lugar, contabilizando ya unas 17 vacas que perecieron en ese trance. “Antes no pasaban estas cosas, estaban secos al lado del alambrado”, señaló un conocedor de la zona.