El drama de una mujer del Chaco que duerme en la puerta de un hospital de Pilar para acompañar a su hijo con cáncer
Dilan Romero tiene 10 años y padece cáncer de hueso y leucemia. Su mamá Rocío es de Chaco, quedó atrapada por la cuarentena y espera un milagro por su hijo. La mujer no cuenta con recursos, duerme en la puerta del Hospital Austral y come la comida que le consiguen las enfermeras. Natalia, la mamá de Ambay, una chiquita que murió de cáncer en 2017, se conmovió con el caso y junto a una ONG recauda fondos para auxiliar a la familia. Si querés colaborar hacé click aquí.
Por Christian Thomsen Hall
Dilan Romero tiene 10 años y se encuentra luchando contra un cáncer de huesos y un cuadro de leucemia que le diagnosticaron cuando apenas tenía 6. Hace tres meses el pequeño tuvo una recaída, por eso la familia tuvo que trasladarse desde la provincia del Chaco hasta el municipio de Pilar, en la provincia de Buenos Aires, para que reciba el tratamiento adecuado en el prestigioso Hospital Austral. Desde entonces, su mamá Rocío Acosta pasa todo el día dentro del nosocomio y ante la falta de recursos económicos, por las noches intenta descansar algunas pocas horas en las rígidas sillas que están ubicadas en el sector de guardia.
Conmovida por el caso, Natalia, la mamá de Ambay -una chica de 16 años que murió en 2017 tras una larga lucha contra el cáncer-, se puso la causa al hombro y ahora junto a la ONG SAUN recauda fondos para ayudar a la familia. "El problema es que los padres del chiquito están separados y la obra social INSSEP solo le cubre el hospedaje a Dilan y su padre. Rocío quedó en una situación difícil, durmiendo en una silla en la guardia del hospital y en algunas ocasiones en la calle, poniendo en riesgo a su hijo, que está inmunosuprimido, y claro a ella misma. Así estuvo tres meses, sin dinero y solamente comía cuando las empleadas del hospital le daban algo".
"Rocío estaba totalmente desamparada. Cuando me enteré de su situación de inmediato me puse en contacto para traerla a mi casa. Sin embargo, al mismo tiempo explotó la emergencia sanitaria por el coronavirus y no pude dar curso a esa idea ya que vivo con mi hijo de 7 años asmático y los médicos me prohibieron que lo exponga a estar en contacto con otras personas", explicó Natalia a LaNoticia1.com, donde además relató: "Desde ese momento comencé una búsqueda desesperada para ver quien podía darle un techo a esta mujer. Pero al ser una chica que está yendo y viniendo todo el tiempo a un hospital, nadie quería recibirla".
Natalia contó que hace pocos días, a raíz del avance de la pandemia y pese a su delicado estado de salud tras haber sido operado de urgencia hace pocas semanas, a Dilan le dieron el alta porque el hospital precisaba más camas para los casos de Covid-19. En consecuencia, Rocío ahora debe ir todos los días al Hospital con su hijo, visiblemente debilitado, para continuar el tratamiento ambulatorio de quimioterapia. Según indicó la joven a este portal," el nene está bastante afectado por todo el tema corticoides y la quimio, que es muy invasiva". Además, los médicos del Austral le anticiparon que el tratamiento se va a prolongar "durante al menos 8 meses".
Finalmente y dadas las circunstancias, en los últimos días el papá de Dilan se ofreció a alojar a su exmujer Rocío en el departamento que le dio la obra social. "Ahora lo que ella más necesita son alimentos porque en principio, el tratamiento oncológico se va a extender hasta fin de año. Además de todas las complicaciones, nos tocó esta época de cuarentena obligatoria que hace todo mucho más complejo. Es una familia muy humilde y la mujer está muy desprotegida, no tiene asistencia social ni hay nadie del Estado que le de ningún tipo de apoyo, sobre todo teniendo en cuenta el estado de salud del chiquito que está muy grave", lamentó Natalia.
La joven destacó el aporte brindado desde la Municipalidad de Pilar, que es fundamental para que Rocío pueda seguir acompañando a su hijo en su tratamiento: "Desde un primer momento se pusieron a disposición y les entregaron una silla de ruedas de gran utilidad para facilitar el traslado de Dilan hasta el Hospital". Además desde la Comuna entregaron varias cajas con alimentos, las mismas que son repartidas por los barrios del distrito para combatir la crisis desatada por la pandemia. "Además un chico llamado Franco de la Municipalidad que cuenta con permiso de libre circulación hasta ofreció a colaborar y actualmente sale buscar las donaciones particulares que le hacen a Rocío y se las lleva hasta la casa", resaltó.
Natalia además contó que la ONG SAUN la está ayudando con el caso. La organización que tiene por objetivo auxiliar a personas en situación de vulnerabilidad ahora se encuentra abocada a conseguir alimentos y productos de higiene para Rocío y Dilan para que tengan durante el extenso lapso que dura el tratamiento. "También estamos juntando ropa de invierno porque ellos llegaron a Buenos Aires en enero y no trajeron nada", contó la mujer, quien precisó que la ONG SAUN aportó un psicólogo que está asistiendo a la familia y habilitó una cuenta bancaria para quienes deseen colaborar con la donación de aportes de manera rápida y segura.
EL RECUERDO DE AMBAY, EL ÁNGEL DETRÁS DE ESTA HISTORIA
La intervención de Natalia Cassinerio en el caso de Dilan Romero y su firme decisión de acompañar a Rocío, quien se encontraba totalmente desamparada, no podría haber sido posible sin la marca que le dejó grabada su hija. En el 2014, Ambay se atendió en el Hospital Austral por un dolor de cabeza y tras una serie de estudios los médicos le diagnosticaron un tumor cerebral.
"Amby" estuvo en tratamiento durante dos años y tras una larga lucha finalmente falleció en 2017. Natalia permaneció en el grupo de whatsapp de mamás con hijos oncológicos que se había formado en el Hospital para brindarse contención mutua, pese a que más de la mitad de las integrantes fueron abandonado el grupo a medida que sus hijos fueron falleciendo.
"Yo me quedé y de alguna manera empecé a colaborar como podía con otras mamás que estaban pasando situaciones similares a las que pasé yo", expresó Natalia, quien conmovió al relatar: "Hace unos meses encontré una carta que había escrito Ambay donde contaba que su sueño era tener una fundación para ayudar a otros chicos que estaban pasando lo mismo que ella".
Permeable a las palabras de su hija, Natalia explicó que de alguna forma ahora intenta concretar el gran anhelo que tenía Amby. "Yo perdí a mi hija y sé lo difícil y triste que es atravesar una situación así. Cuando me llegó el caso de Rocío no pude mirar para otro lado. Quiero ayudarla y apoyar a Dilan durante los 8 meses de tratamiento para poder acompañarlo y estar a su lado", concluyó.
Si querés colaborar con Dilan hacé click en el siguiente enlace: https://www.saun.org/casos/caso/rocioxnatalia
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