Robo del Siglo: Problemas tecnológicos con uno de los acusados
Uno de los cuatro acusados que tomaba notas en su netbook, fotografiaba a los testigos y registraba las declaraciones con un grabador digital. El Tribunal decidió incautar los objetos y reprenderlo. El juicio se reanuda el lunes.
Fernando Araujo es uno de los cuatro acusados por el "Robo del siglo" al Banco Río de Acasusso. Siempre se ha mostrado como un apasionado de la tecnología y desde el comienzo del juicio tomó notas en su netbook de todo lo que sucedía dentro del tribunal.
En la jornada de ayer, la Secretaría del Tribunal descubrió que la netbook también era utilizada para fotografiar a los testigos y que tendría en su archivo imágenes de todos y cada uno de los que por allí pasaron.
María Helena Vázquez, Presidenta del Tribunal detuvo intempestivamente la audiencia: “Me dicen por Secretaría que en la computadora de Araujo se abrió una ventana y se congeló una imagen del testigo”. Araujo y su abogado recibieron todas las miradas que se encontraban en el recinto. El letrado Adolfo Tamini sostuvo: “Me dice que lo hizo, pero que no fue con mala intención”, y el propio Araujo agregó: "No lo hago de mala fe, sólo quiero ayudar a mis abogados".
La computadora fue incautada en un sobre lacrado con el fin de realizar las pericias necesarias por los expertos en informática del Poder Judicial. De todas maneras el acusado ya anunció lo que iban a encontrar: fotos de todos y cada uno de los testigos.
Araujo ya había tenido problemas con las fotos en lugares indebidos. Un año antes del asalto se le retuvo una cámara fotográfica por sacar fotos dentro del Banco Río de Acasusso.
Una hora después de este incidente, la tecnología volvió a llevarse todo el protagonismo en la tercer jornada del juicio, ya que el Fiscal Eduardo Vaiani advirtió que Fernando Araujo disponía de un grabador digital con el que llevaba un cuidadoso registro sonoro de las declaraciones de los testigos. El Juez Gonzalo Aquino, indignado, dijo: “No puede hacer lo que quiere, mañana se va a cambiar de ropa acá o va a poner una antena satelital”.
Estos sucesos opacaron la declaración de los buzos que registraron el desagüe por donde se escapó la banda mientras los policías rodeaban las inmediaciones del banco. Ernesto Hussain, uno de ellos explicó: "El caño era demasiado grande, podía entrar un camión". Otro de los testimonios interesantes fue el de una de las rehenes que sostuvo que los delincuentes decían que debían permanecer tranquilos porque "nadie quería otro Ramallo", por el caso conocido como "la Masacre", ocurrido en 1999 en una sucursal del banco de la Nación. El juicio se reanudará el próximo lunes.