La Comisión provincial por la memoria denuncia crisis humanitaria en el penal de Magdalena
La Comisión Provincial por la Memoria (CPM) presentó un informe especial La masacre de Magdalena: 12 años después, el fuego sigue ardiendo. En el mismo registra la grave situación de encierro en la Unidad penal n° 28 la cual "está superpoblada". "Los jueces mandan gente a las cárceles y después se olvidan", dijo el copresidente de la CPM, Adolfo Pérez Esquivel.
La Comisión Provincial por la Memoria (CPM) presentó un informe para denunciar que las condiciones de hábitat, infraestructura y los malos tratos que reciben los internos en la Unidad Penal Nro. 28 de Magdalena "son peores" que las que existían en 2005, cuando un total de 33 presos murieron al incendiarse uno de los pabellones y quedar encerrados. En ese episodio fueron juzgados tanto los jefes y varios de los agentes penitenciarios de entonces.
Según se adelantó, la cárcel "está superpoblada", como así también que "en los últimos tres años se denunciaron más de dos mil hechos de torturas, agresiones físicas, requisas vejatorias y desatención de salud".
"Los jueces mandan gente a las cárceles y después se olvidan", dijo el copresidente de la CPM y Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, durante una conferencia de prensa donde presentaron el informe.
Se necesitarían tres unidades penitenciarias como la que existe para alojar a todas las personas que hoy se encuentran encerradas en la Unidad Penitenciaria 28 de Magdalena. “Los jueces mandan gente a las cárceles y después se olvidan”, dijo @PrensaPEsquivel
— Comisionporlamemoria (@CPMemoria) 13 de diciembre de 2017
Pérez Esquivel detalló que recorrió diferentes pabellones durante 10 horas, SAC (separación de área de convivencia), admisión y sanidad y una vez más, donde se constataron las graves condiciones de detención en que se encuentran las personas allí detenidas y numerosos casos de torturas y malos tratos.
"Pasaron 12 años y la situación de la UP Nro. 28 es más grave de lo que era en 2005. Hacinamiento, sobrepoblación y torturas son la clave de un deterioro que se ha agravado con los años", precisaron.
Un primer dato alarmante indica que en 2005 había 592 detenidos, en un lugar con capacidad para 358 personas, y desde ese año a la actualidad, la cantidad de personas detenidas pasó de 592 a 1.199, sin embargo, no se amplió la capacidad de alojamiento. También precisan que en los últimos tres años, se realizaron 777 entrevistas con personas detenidas en la UP 28 o sus familiares y a partir de ellas se denunciaron 2.015 hechos que implicaron agravamientos en las condiciones de detención, todas ellas torturas o malos tratos.