Obispo de Mar del Plata pidió no ser "careta" y ayudar a los pobres los 365 días del año
Miguel Mestre encabezó una homilía por la Jornada Mundial de los Pobres, de la que participaron vecinos de diversos barrios humildes de la ciudad balnearia. El obispo almorzó con los pobres, lavó pies y pidió "vivir en el día a día, de manera personal" la ayuda a los más necesitados.
En el marco de la Jornada Mundial de los Pobres impulsada por Obra Lumen, un movimiento de jóvenes católicos de Brasil, el obispo de Mar del Plata, Miguel Mestre, encabezó actividades en las que dijo que a los más necesitados hay que ayudarlos todos los días para que no sea "una careteada".
"Para que no sea una celebración careta, sabemos que tiene que estar sostendia por el cuidado y la preocupación de los pobres los 365 días del año", dijo la máxima autoridad religiosa marplatense en la homilía que encabezó en la parroquia La Asunción.
Mestre desayunó y almorzó con vecinos de barrios con vulnerabilidad social extrema, lavó pies de los más necesitados y llamó a los fieles católicos a "acompañar a los que están con una complicación particular, como lo quiere hacer la Iglesia de manera muy concreta con esta jornada de los pobres".
El obispo señaló que aunque el papa Francisco dispone un día al año para esta jornada, la preocupación por los más pobres debe ser diaria para que no sea "una careteada".
"Esto que podemos hacer en grupo, comunitaria e institucionalmente, también lo tenemos que vivir en el día a día entre nosotros, de manera personal", dijo.