Azul: Cerró un frigorífico y 300 empleados realizan una toma pacífica
El Establecimiento Frigorífico Azul, con 140 empleados efectivos y 150 temporarios, decidió cerrar las puertas. Los empleados decidieron tomar la planta de manera pacífica. El Intendente Duclós inició gestiones para revertir la situación.
Cerca de 300 familias de Azul quedaron sin su principal fuente de ingresos, luego que el Establecimiento Frigorífico Azul decidiera cerrar sus puertas. Al enterarse de la noticia, los ahora desocupados decidieron permanecer dentro de la planta, en lo que es considerado una toma pacífica.
La planta, dedicada a la faena y elaboración de liebres y gallinas, es de capitales alemanes y tiene más de 30 años de antigüedad. La noticia, comunicada el lunes por la tarde, tomó por sorpresa a los empleados que decidieron permanecer en el lugar defendiendo sus puestos de trabajo.
Susana Reales, del gremio de la Alimentación, relató al programa local "La mañana de 98pop", que los gerentes les habrían informado la recepción de un comunicado enviado por los accionistas de la firma, desde Alemania, donde se los notificaba del cese de las operaciones.
El despido significó un "golpe tremendo y sumamente sorpresivo. Nos quedamos sin palabras, porque no hubo ningún indicio en las semanas anteriores de que eso pudiera llegar a pasar". Sí admitió que "venían alegando que el Gobierno les debía unos 2 millones de pesos por las exportaciones, que eso era mucha plata para ellos y que no la podían recuperar", manifestó Reales.
En los telegramas de despido, los empresarios habrían aducido una importante crisis, por lo cual se abonaría el 50% de la indemnización correspondiente a cada trabajador. Sin embargo, ellos reclaman poder seguir trabajando.
Tras conocerse la noticia, el Intendente Omar Duclós afirmó a los empleados que hará todo lo posible por revertir la situación. Incluso manifestó que hablará con la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner para que intervenga.
La empresa difundió un comunicado, reproducido por el medio InfoAzul, por medio del cual expresan por qué tomaron esa decisión. "En los últimos ejercicios comerciales EFASA acumuló cuantiosas pérdidas y estas fueron sostenidas únicamente con el aporte de dinero de sus socios. Estos factores confluyen en esta lamentable decisión del cese de nuestras actividades y generan en todos nosotros un profundo dolor".
Para los empresarios, no se trata de una "decisión repentina, sino una larga historia que lleva años de discusión". Además, hacen hincapié en la demora por parte del Estado en la devolución de los créditos fiscales "lo que provoca una situación financiera asfixiante".