Baradero: Policía que mató a joven por la espalda declaró y fue trasladado a Arrecifes
El suboficial de la Bonaerense Gonzalo Kapp prestó declaración ante el Fiscal Manso en San Pedro y permanece detenido, ahora en Arrecifes. Además, tres testigos dieron su versión de los hechos, entre ellos el joven que estaba con Lucas Rotela cuando el policía le disparó por la espalda en la Plaza Colón de Baradero. Habrá una marcha a las 18.00. La hija del policía pidió perdón en un acto público.
El Fiscal Marcelo Manso tomó declaración durante tres horas este domingo al policía Gonzalo Kapp, acusado de asesinar por la espalda al joven Lucas Rotela, de 19 años, el sábado por la madrugada en un confuso operativo policial que tuvo lugar en la Plaza Colón de Baradero, tras la segunda noche del Festival de Folklore que año a año tiene lugar en esa ciudad.
Kapp llegó a la Fiscalía de San Pedro tras permanecer en la sede de la DDI de San Nicolás y luego de declarar fue trasladado a Arrecifes, donde está alojado en calidad de detenido, acusado de "homicidio calificado".
Durante su declaración estuvo acompañado por el Dr. Mauricio Di Lorenzo, abogado nicoleño contratado por su familia para ejercer la defensa del policía, que fue desafectado de la fuerza tras conocerse el hecho.
De la misma manera, el Jefe de la Policía Bonaerense Juan Carlos Paggi relevó de su cargo al titular de la Comisaría de Baradero, Raúl Franzoia.
El Fiscal Manso también escuchó el testimonio de tres testigos presenciales del momento de los disparos contra Lucas Rotela, entre ellos el de un joven que acompañaba al asesinado.
Mientras tanto, en La Plata, el Gobernador Daniel Scioli se reunió con su Ministro de Justicia y Seguridad -de quien depende la policía- Ricardo Casal, para interiorizarse del caso tras su regreso de Italia.
Familiares y amigos de Lucas Rotela convocaron a una marcha para este lunes a las 18.00, cuyo punto de encuentro será la Plaza Colón, donde balearon al joven. Desde allí irán a la Comisaría y luego se dirigirán hacia la Municipalidad.
En la Plaza Mitre, la principal de Baradero, unas 500 personas que menifestaban su repudio al asesinato del joven escucharon anoche las palabras de la hija del policía Gonzalo Kapp.
"Pido perdón, pero no soy culpable por lo que hizo mi padre", dijo la adolescente, en llantos. Tras ello, recibió abrazos y consuelo de los presentes, muchos de los cuales también hablaron en el micrófono abierto a quien quisiera expresarse.