La operación de carótida de Kirchner y la angioplastia
Al igual que en el mes de Febrero, Néstor Kirchner sufre una nueva obstrucción de carótida. Esta afección coronaria lo llevó a practicarse una angioplastía. Ahora está nuevamente en la Clínica Los Arcos. En que consiste esta afección que evalúan los médicos. Es la segunda intervención en el año.
La arteria carótida puede obstruirse a partir de un coágulo sanguíneo o por acumulación de placas -sustancia grasa- que puede estrechar la arteria e incluso llegar a desprenderse y tapar una arteria cerebral.
Este cuadro médico puede provocar un accidente cerebro vascular, por ello la urgencia de la intervención a la que puede ser sometido el Presidente de la Unasur y esposo de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que está presente en la clínica donde evalúan su estado.
La enfermedad de la arteria carótida ocurre cuando se estrechan o se bloquean. Son 2 vasos sanguíneos grandes a cada lado del cuello que llevan sangre al cerebro y los ojos. Un estrechamiento u obstrucción de las arterias disminuye o detiene el flujo de sangre a la cabeza y puede causar síntomas temporales tales como mareo, sensación de desmayo, ceguera parcial o entumecimiento. Una arteria carótida bloqueada también puede causar un accidente cerebrovascular o muerte.
La causa habitual de una obstrucción parcial o completa es el endurecimiento de las arterias. La placa obstructora se compone de tejido cicatricial, las células de la sangre que se han movido en la pared arterial, el colesterol y otras sustancias grasas. Esto es lo que reduce el flujo de sangre cuando una placa se desprende.
En cuanto a los síntomas es frecuente que la mayoría de las personas con enfermedad de las arterias carótidas no los presenten. Cuando la enfermedad provoca síntomas, el riesgo de un accidente cerebrovascular aumenta considerablemente, según sostienen especialistas de la Universidad de Michigan, Estados Unidos.
Aún no se conocen los síntomas exactos que presentó esta tarde Néstor Kirchner en la Residencia de Olivos.
Se considera que debe operarse tras los estudios pertinentes aquel paciente que tiene síntomas de bloqueo de más de un 70% de la carótida. Esa intervención quirúrgica consiste en cortes del cuello y arteria para eliminar la obstrucción como ya sucedió en la ocasión anterior.
El informe del especialista estadounidense dice: "La enfermedad de la arteria carótida no se puede eliminar por completo, pero se puede controlar. El objetivo del tratamiento es evitar que se bloquee más y produzca un accidente cerebrovascular".