Clausuran frigorífico de Alberto Samid en el Riachuelo
El ACUMAR, autoridad de cuenca, endureció los controles sobre los vertidos sobre el Riachuelo. "El Fuego y el Agua" (ex Liwin), fue clausurada por graves daños al medio ambiente y perjuicio para la salud. La reacción de Samid: "Me parece muy bien". Anticipó que presentará los papeles para que le levantan la clausura rápidamente.
La Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar) clausuró varias industrias de forma preventiva, en el marco de la nueva normativa que regula los vuelcos contaminantes en el cuerpo de agua. Uno de los establecimientos es propiedad del empresario cárnico Alberto Samid.
El cierre se produjo luego de que, tras cinco intimaciones, la empresa "El Fuego y El Agua SA" siguiera volcando efluentes que no cumplían con la norma, según informaron en el organismo.
Samid elogió el procedimiento y explicó que este jueves presentó los requerimientos por lo que espera que mañana se levante la clausura.
"Me parece muy bien lo que están haciendo, lo están haciendo con todas las empresas. Más allá de que uno tiene consecuencias, hay que adecuarse cuando las cosas son como tienen que ser. Nosotros habíamos cumplimentado el 96% pero nos faltaba ese 4 por ciento. El tratamiento que tenemos del agua es perfecto pero debíamos el plan de reconversión de alguna obra. Mañana ya tenemos levantada la clausura", aseguró a La Nación.
Por su parte, Gladys González, presidente de Acumar, dijo que están siendo "más estrictos en la norma, intensificando las inspecciones y mejorando nuestros sistemas de control sobre estos establecimientos que operaban de forma irregular, afectando de forma grave e inminente los recursos naturales, el agua, el suelo y el ambiente donde viven los vecinos de la Cuenca".
Entre los establecimientos clausurados están aquellos dedicados a la cría de ganado porcino como Bravestar SA o a la faena de ganado vacuno como "El Fuego y El Agua SA" (Ex Liwin, de Samid); operadores de residuos peligrosos como Draconis SA; empresas dedicadas a la producción de cartón como Cartoindustria SA (ex Fibrapapelera) o a la impresión como Corrucart SRL y curtiembres como Algipel SA.
"Estos son casos en los que Acumar debió recurrir a la clausura preventiva con el objetivo de evitar un daño ambiental mayor y la salud de la población vecina", indicaron en el organismo mediante un comunicado.
El foco, según anunció la administración estará puesto en 219 compañías que se identificaron como más contaminantes. Aunque en el Cuerpo Colegiado, formado por ONGs y el Defensor del Pueblo, celebraron la medida aunque aún analizan los nuevos efectos que tendría la regulación.