Colón: El municipio quiere regular "las previas" de los boliches
Ante la proliferación de fiestas privadas en las que los jóvenes se emborrachan antes de salir, la comuna busca mecanismos de intervención para la prevención. "La previa" es un clásico que ya supera a los boliches y muchas veces con consentimiento de los padres.
Las denominadas "previas", fiestas que se realizan en horarios que preceden el ingreso a los boliches, se han transformado en un problema en muchos distritos bonaerenses, ya que en la mayoría de los casos los jóvenes que asisten salen de allí alcoholizados y generan disturbios en la vía pública.
Por ello, el Intendente de Colón Ricardo Casi ordenó a su gabinete profundizar los controles para evitar ese tipo de celebraciones.
El gobierno considera que las fiestas de "previa" sólo producen borracheras y se han propuesto intervenir en la situación. La Dirección de Inspección y la policía controlarán férreamente para que no haya menores ni desmanes.
Además, la propuesta da un paso más y evalúan la creación de un registro de fiestas para afinar los controles.
Los jóvenes de la ciudad consideran que Casi "se puso la gorra" y que busca "prohibir la diversión". A su vez, advirerten que los controles son necesarios pero "sin necesidad de atropellar el derecho a divertirse".
Las "previas" suelen organizarse como "fiestas privadas" en clubes, locales o quintas, muchas veces alquilados para tal fin. Se distribuyen tarjetas que se venden como entradas anticipadas, lo que supone un ejercicio ilegal de la actividad comercial. Aunque en la mayoría de los pueblos la costumbre es una "casa de familia" donde los padres consienten el consumo.