Cristina inauguró la Sala de la Juventud Néstor Kirchner
Luego de encabezar un acto en San Fernando, donde dejó inaugurada la línea de producción de Milka de la firma Kraft Food, la Jefa de Estado fue al Congreso para este homenaje a su marido y expresidente. Pidió "basta de mala onda y a trabajar". Resaltó el papel de los jóvenes en la política y destacó que "tienen que pasar la posta" para permitir la renovación.
"Estas épocas son mucho más lindas, no se equivoquen, construyan sus propias historias, sus propios hechos, están viviendo un momento histórico en el país y en el mundo", afirmó la mandataria hacia los jóvenes.
"Yo me venía acordando de empresas argentinas que dan trabajo a argentino, pero con capitales estadounidenses. Y yo pienso que diferentes fue nuestra burguesía con la de ellos. Allá ellos, ganó el sector industrialista".
"Después venía yo acordándome con la gran depresión, en el 30, acá se reaccionó con el derrocamiento de Yrigoyen. Por todo eso vino el peronismo".
"Si nadie viene de abajo, no es una revolución, dijo Moreno. Algo de lo que me había olvidado. A partir de 2006, de la restructuración de la deuda, comenzamos a tener déficit comercial, y cuestiones que tienen patente".
"Me había olvidado, hablaba del superávit comercial, y me equivoqué, en realidad se equivocó el INDEC, en los primeros cuatro meses estamos con 4795 millones de dólares de superávit comercial".
"Y aprovecho también, porque parece que hay gente que está empeñada en hacer mal en la Argentina. Todavía hay gente que tiene temores. Por favor, no crean nada, esta Argentina es absolutamente responsable y previsible. Pedirles que no crean, porque les han mentido demasiado. A los que están empeñados que a los argentinos les vaya mal, que dejen de hacerlo, porque nosotros estamos haciendo todo para que a la Argentina nos vaya bien".
"Cuando un país comienza a cambiar gobiernos, no le va a ir nada bien al mundo. Lo esencial es creer que no se necesitan políticas de ajuste, sino de crecimiento. Esto de generar trabajo, para generar consumo. Y restablecer la cordura que muchos dirigentes importantes han perdido".
"Nosotros tenemos la historia, salvo que haya dictaduras militares. Yo creo que el aprendizaje que hemos hecho, y no para que nos tomen de modelo, y como quieren envenenarnos. Les pido que seamos sensatos, que no creamos en todo lo que leemos".
"Yo les pido que pongamos esfuerzo, y discutamos las cosas que hay que discutir. Yo con él me agarraba de los pelos, y por eso no nos aburrimos tanto tiempo junto. Las últimas bodas que cumplí con él fue la de coral, y eso me gusta. Cumplí 35 años de casada, 35 años de peleas monumentales. Peleábamos por lo que creíamos. Éramos muy especiales, no mejores que nadie, pero sí muy especiales".
"No digo que todos tengan que vivir así, pero tener objetivos comunes, que se yo".
"Lo que él quería era que sigamos caminando y trabajando. Necesitamos que florezcan miles. En algún momento tendremos que pasar la posta, porque es así. No podemos ser agua de estanque. La renovación es algo que hace a la subsistencia misma. En este lugar, que era de él, que vino muy pocas veces. La última vez fue para escucharme a mí".
"Yo les pido a todos los argentinos, de corazón. No por mi, no por él, por estos pibes, y si no les gusta estos pibes, por los de ustedes, los que tienen en su casa. Basta de mala onda y sigamos trabajando por el país", finalizó Cristina.
Más temprano la mandataria encabezó el lanzamiento de la línea de producción de chocolates Milka en la planta de San Fernando de Kraft Food.