El drama de los jubilados ahogados por la tarjeta de crédito: Ni bancos ni el Gobierno ofrecen solución
No es noticia que la gran mayoría de jubilados del país no llega a fin de mes. Al magro sueldo y la quita de beneficios, se le sumó un 2018 complicado, donde la inflación superó ampliamente los incrementos percibidos por el sector pasivo. Así como gran parte de la sociedad se encuentra bajo fuertes deudas con préstamos y tarjetas de créditos, los jubilados no son la excepción. Los bancos no ofrecen refinanciaciones y el Gobierno de Mauricio Macri no sólo mira para otro lado sino que intenta buscar la forma de continuar mellando el salario de los adultos mayores.
La crisis económica golpea a todos los sectores, pero sin dudas los jubilados pertenecen al grupo de los más vulnerados. El recorte en sus ingresos, la quita de medicamentos y otros servicios, sumado a la inflación incontrolable ha profundizado los problemas en el sector pasivo.
Uno de los tantos que padecen los jubilados son las deudas con los bancos, principalmente vía las tarjetas de crédito. Todas las entidades financieras le han otorgado a jubilados y pensionados un plástico para poder cobrar su haber y otro para endeudarse.
La ecuación es simple: Si no alcanza el dinero, las tarjetas de crédito se ponen al rojo vivo. Esto sucede en gran porción de la sociedad, pero llegada la situación de no poder pagar muchos bancos dan de baja la tarjeta y ofrecen al usuario un plan de financiación, ya que se le hace imposible abonar la totalidad de los consumos en tiempo y forma.
Esta posibilidad no existe para los jubilados. Las entidades financieras consultadas por Lanoticia1.com indicaron que el jubilado puede dar de baja su tarjeta solamente accediendo a un crédito para cancelar la totalidad de lo consumido. Sin embargo, en la mayoría de los casos, los jubilados ya han utilizado préstamos para subsistir y no tienen capacidad crediticia.
Las entidades financieras saben que cada mes se deposita el haber del jubilado en su cuenta, y que ellos pueden debitar de allí lo consumido con el plástico. Generalmente se debita el "pago mínimo", lo que hace que al jubilado se le sigan incrementando los abultados intereses.
Por parte del Gobierno de Mauricio Macri no hay señales de ayuda a los abuelos en este sentido. No sólo les bajó el sueldo 13% el año pasado sino que mantiene en vilo una nueva reforma previsional buscando seguir recortando haberes en el sector pasivo.
Mientras tanto, la oposición no sale de declamaciones genéricas acerca de los problemas de los adultos mayores, pero en lo concreto tampoco han hecho nada para colaborar en paliar esta situación que está ahogando a los jubilados.
Como en muchos otros tiempos, los abuelos siguen a la buena de Dios.