El drama de un hogar de ancianos asfixiado por deudas con AFIP y de servicios
La institución tiene casi 100 años. El inmbueble fue donado por familias solidarias y la administración está en manos de una cooperadora de vecinos. Deben 2.700.000 pesos al fisco y les dicen que tomen una moratoria que los hundirá nuevamente. Hay 40 abuelos alojados y necesidad de continuar con los servicios que prestan desde hace un siglo.
Las tarifas, impuestos y regulaciones a los hogares de anciano de la Provincia desembocan en que sólo pueden existir aquellos que perciben altos ingresos.
En San Pedro, un asilo gestionado por una cooperadora debe 2,7 millones de pesos a la AFIP. Además, soportan las fuertes subas de los servicios y los costos de tener al día las múltiples exigencias de funcionamiento que no tienen los hogares clandestinos o muchos de los habilitados por el Pami que mantienen a los abuelos en condiciones infrahumanas, sobre todo en el interior donde los controles llegan poco o no llegan.
"Llega una cosa atrás de otra y se hace prácticamente imposible, porque no se puede dejar de pagar ni el gas, ni la luz, ni dejar de darles de comer (a los residentes). Estamos atados de pies y manos, vos te encontrás que te llegan las deudas, te llegan y te llegan y no podemos afrontarlas, eso nos desespera, y por eso hay miedo de tener que cerrarlo, porque no les vamos a mentir, lo pensamos", indicaron desde la Casa de Ancianos.
LaNoticia1.com consultó a un abogado acerca de la posibilidad de un embargo a la entidad, y qué problemas acarrearía tal situación: "Es una traba muy grande en caso de que les hagan los embargos en todas las cuentas, porque primero qué hacen, primero lo inmovilizan, o sea que, no lo ayudan a recomponerse, porque en realidad la AFIP debería ayudar al contribuyente a que pueda pagar su cuenta, pero no, lo inmoviliza directamente, y así te va agravando tu situación económica y luego de eso, te califica de alto riesgo", explicó una fuente judicial.
En medio, los residentes, que tienen incertidumbres acerca de su futuro. Según pudo saber este medio, los adultos mayores que allí se alojan poseen un profundo cariño por el lugar, y hasta han escrito poemas sobre su Casa de Ancianos. En este sentido, la situación les genera malestar y tristeza.
El hogar funciona en terrenos que fueron donados por un vecino y el edificio es histórico en la ciudad, y se encuentra en condiciones. El principal reclamo es que desde el Estado intenten contemplar la situación y buscar la forma de encauzar el problema en lugar de continuar avanzando en la acumulación de inconvenientes.