El Senado convirtió en ley la legalización del Cannabis medicinal
La Cámara alta sancionó por unanimidad la legalización del Cannabis para uso medicinal. El proyecto garantiza la provisión de aceite cannábico a ciertos pacientes y habilita su investigación para uso médico. Solicitan al Ejecutivo una rápida reglamentación. Emoción entre familiares de pacientes. No habiltan el autocultivo.
El Senado convirtió en ley por votación unánime el proyecto que habilita el uso de Cannabis medicinal, impulsado por familiares de pacientes que se convocaron en los salones linderos al recinto para celebrar lo que consideraron un avance histórico.
La iniciativa fue aprobada sin debate tras el tratamiento de la ley de Emprendedores y recibió apoyo de todos los bloques políticos.
En su artículo primero, establece "un marco regulatorio para la investigación médica y científica del uso medicinal, terapéutico o paliativo del dolor de la planta de Cannabis y sus derivados, garantizando y promoviendo el cuidado integral de la salud".
El eje de la iniciativa es la creación de un "Programa Nacional para el Estudio y la Investigación del Uso Medicinal de la Planta de Cannabis, sus derivados y tratamientos no convencionales", en la órbita del Ministerio de Salud. Entre sus numerosas funciones, este programa deberá "garantizar el acceso gratuito al aceite de cáñamo y demás derivados del Cannabis" a todos los que se incorporen al programa, e "investigar los fines terapéuticos y científicos" de la sustancia.
El momento de la votación
Unánime. Cannabis medicinal. Se llora fuerte en el salón Illia del Congreso. pic.twitter.com/DLvXOvyPWk
— Julieta Roffo (@jroffo) 29 de marzo de 2017
En paralelo, también por unanimidad, el Senado aprobó un proyecto de comunicación de la salteña María Cristina Fiore para pedirle al Poder Ejecutivo que promulgue y reglamente la norma cuanto antes donde el límite fijado en la flamante ley es de 60 días, según informó Parlamentario.
Si bien el texto no habilita el cultivo personal, sí garantiza el acceso al aceite de Cannabis a pacientes que acrediten tener las enfermedades que fijará la reglamentación, entre ellas la epilepsia refractaria.
La norma autoriza la importación del aceite hasta que el Estado se encuentre en condiciones de producirlo, con prioridad para los laboratorios públicos nucleados en la ANLAP (Agencia Nacional de Laboratorios Públicos), y también permite el cultivo de Cannabis por parte del Conicet y el INTA con fines investigativos.