La Defensoría Bonaerense relevó la situación de salud y alimentación de sectores vulnerables
El organismo que defiende los derechos de los habitantes de la Provincia elaboró un informe sobre las condiciones de los sectores más desprotegidos en la crisis actual. Crecimiento de familias en comedores, mala alimentación, resurgimiento de enfermedades, obesidad o bajo peso y ausentismo escolar son algunas de las problemáticas.
La Defensoría del Pueblo Bonaerense realizó un informe sobre el impacto de la crisis en relación a la salud y alimentación de los sectores vulnerables de la Provincia. El estudio se hizo en base a entrevistas a funcionarios y referentes comunitarios de comedores y merenderos en los territorios de Almirante Brown, General San Martín, Moreno, Hurlingham, Lomas de Zamora y Florencio Varela.
Los datos arrojan que hay familias que nunca habían pedido comida y actualmente lo hacen. Donde asistían jóvenes de 16 o 17 años, hoy concurren personas de tercera edad y padres de familia. En algunos casos, es la única ingesta del día. Todos los municipios coinciden que hay más gente solicitando alimentos.
En relación a la salud “emergieron enfermedades por falta de vacunas, además de observarse el surgimiento de patologías y enfermedades que se creían erradicadas”, señaló el informe. Se registran menores con bajo peso y ausentismo escolar por falta de zapatillas, ropa o útiles escolares.
En cuanto a la alimentación, el consumo de carne y de leche cayó estrepitosamente y subió el de harinas produciendo obesidad o falta de una dieta equilibrada. Se volvió a ver a chicos “cirujeando” al basura, ollas populares, acampes y trueques por alimentos.
Según el informe “los municipios asumieron la responsabilidad de dar respuestas ante la crisis alimentaria, ya que la asistencia provincial resulta exigua y la asistencia nacional es prácticamente nula”.