La "Generación Y" está llegando a las empresas e intentan imponer sus reglas de juego
Se trata de quienes nacieron entre 1982 y 1995. Son jóvenes creativos y audaces producto del avance tecnológico. No creen en "ponerse la camiseta", en "hacerse desde abajo" ni en "pagar derecho de piso". No trabajan después de hora y no dudan en renunciar y buscar otro trabajo si no están satisfechos. Priorizan sus gustos y no quieren pasar su vida en una misma empresa. Retenerlos es todo un desafío.
Estos jóvenes profesionales pertenecen a la clase media y viven, por lo general con sus padres. Las dificultades de acceso a la vivienda propia y el hecho de que la maternidad y la paternidad se posterguen cada vez más, generan este fenómeno de una adolescencia extendida.
Requieren mucha más libertad, menos reglas y más flexibilidad. Asi como están acostumbrados a apretar botones y que la información aparezca al instante, también quieren llegar más rápido a ser jefes y gerentes. Son mucho más inquietos que sus antecesores y están dispuestos a cambiar de empleo cuando se aburren, escasean desafíos o la empresa no ofrece un rápido camino de ascenso.