Olavarría: Docente y militante de la APDH denunció que fue golpeado por policías
Ariel Rodríguez acusó a las fuerzas de seguridad de esposarlo y tratarlo como un delincuente, tras intervenir en un operativo policial. "Les dije 'soy de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos', y eso los terminó de enfurecer", comentó. Asuntos Internos de la bonaerense investiga el caso.
Ariel Rodríguez, docente de la Escuela N° 65 de Olavarría, denunció maltrato y abuso de la fuerza por parte de efectivos de la policía bonaerense.
Rodríguez se topó con un operativo y advirtió que una oficial insultaba a un chico que habría robado una bicicleta. El docente relató al respecto al sitio Infoeme: "Ante el hecho intento calmar a la oficial diciéndole que no insultara al joven, que estaba todo bien, ya lo tenían en sus manos. Que lo trasladaran pero que no lo maltraten ni lo insulten".
Recibió como respuesta una declaración polémica: "A éstos hay que hacerlos mierda, hay que matarlos", le dijo la oficial según sus declaraciones. "Escuché eso y todo tipo de insultos y agravios que no corresponden justamente por ser agentes de Estado", agregó el docente.
Al instante, llegó otro policía y lo redujo tomándolo del brazo, contó Rodríguez. "Yo me resisto y empezamos a forcejear bruscamente. Me tuercen los brazos, y me empiezan a pegar diciéndome que no me tendría que haber metido", denunció la víctima.
"Ante la desesperación del dolor en el brazo les digo que soy de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, y eso fue como que los terminó de enfurecer. A partir de ahí empezaron a decirme que me iban a meter los Derechos Humanos por la cola", agregó Rodríguez.
El docente contó que lo trasladaron y estuvo detenido alrededor de una hora, permaneciendo incomunicado, esposado, aún con el guardapolvo. "En un momento pedí agua y me contestaron que no era un picnic", dijo.
Rodríguez al ser liberado se negó a firmar una "declaración" que no había realizado. Asuntos Internos de la bonaerense investiga el caso.
Por último, el militante de la APDH declaró: "Ahora recibo amenazas, de que si me ven en la cuadrícula me matan. Me van a arrancar la cabeza, me dicen".