Santiago Montoya: "A la solidaridad se la invoca con impuestos hace 10 años siempre para los mismos"
El creador y extitular de ARBA en la gestión de Daniel Scioli aseguró que se necesita "poner en la mesa a los otros niveles del estado porque el bolsillo de los contribuyentes es uno solo y nos estamos olvidando que aumenta no solo la provincia" en medio del debate de la Ley impositiva 2020. Advirtió que el Inmobiliario es un impuesto "complejo" el cual "hay que conocer al detalle para poder evitar que en una ley se produzcan algunos casos catastróficos". Las cargas impositivas sobre la clase media.
- ¿La ley impositiva de la provincia de Buenos Aires, como dice la oposición es un impuestazo o como dice el gobierno es una actualización?
He visto a funcionarios de la provincia explicando ciertas cuestiones sobre el aumento de impuestos, con un promedio del 55% del inmobiliario urbano (IU) y del 75% del Inmobiliario Rural para el caso de los que tengan campos. También se habla de no hacer cambios de la tabla del impuesto automotor.
Como tema central, con tanto tiempo en la provincia de Buenos Aires (fue el creador y director de ARBA), hay que comprender que el impuesto inmobiliario, sobre todo el IU, es complejo, hay que conocer el detalle de todo eso para poder evitar que en una ley se produzcan algunos casos catastróficos.
Por ejemplo el IU, o sea las casas de la gente, tienen un sistema de topes. Durante mi gestión, se hizo el último revalúo integral urbano de la provincia después de 50 años. Los que se venían haciendo eran parciales.
Después de ese revalúo integral, hace unos 12 años, la provincia no ha vuelto hacerlo. Aprovechando las modernizaciones normativas, hicieron parciales y una de las situaciones que quedó por actualizar es el sistema de topes. Es decir, que no se aplicara todo el peso del impuesto que surgiera del cálculo para todas las propiedades inmuebles.
Esos topes se caían en el momento en que se produjera una novedad en la base catastral, como la compra venta del inmueble: si un cuidadano está viviendo hace 30 años está alcanzado por un tope. En el momento en que esa propiedad sufre la compra venta o una ampliación, allí se producía la liberación de los topes. Pero en este aumento, no están aclarados.
Cuando hablan de un aumento promedio del 55%, las cuestiones que surgen son: por un lado, que es verdad que mantienen el poder adquisitivo de la recaudación del impuesto inmobiliario de la provincia, suponiendo que no haya una baja en la cobrabilidad. Porque en la medida en que ese 55% está muy por encima de los salarios y las jubilaciones, cuando uno produce un incremento de ese tipo está el riesgo en la caída de la cobrabilidad. Pero suponiendo que no se de, en teoría se mantiene el poder adquisitivo con lo cual el gobierno estaría en lo cierto de que no es un impuestazo.
Pero ese aumento como es promedio, quiere decir que hay algunos a los que le aumenta menos. Si ese es el promedio, hay muchos que tienen aumento muy bajo, qué pasa con los que están arriba del mismo. Ahí viene lo que reclaman los sectores afectados de si esto no es un impuestazo.
- Esto se agrega a que las tasas municipales también van a actualizarse con muchos municipios en situaciones financieras complicadas
Necesitamos poner en la mesa a los otros niveles del estado porque el bolsillo de los contribuyentes es uno solo y nos estamos olvidando que aumenta no solo la provincia. También existe un Inmobiliario complementario y a nivel nacional, Bienes Personales.
Los salarios y las jubilaciones aumentaron menos que la inflación y estaríamos planteando un incremento que a la gente se le va a complicar pagarlo. Estamos 10 ó 15 puntos por arriba del aumento de jubilaciones y salarios.
A los que tienen más, hace más de 10 años se viene haciendo esto, ahora se habla de la solidaridad pero antes se hablaba de equidad y en el último gobierno se pedía más esfuerzo.
Las personas que tienen propiedades compatibles con el estilo de vida de clase media para arriba, vienen recibiendo aumentos por ariba de la inflación prácticamente todos los años desde hace más de 10. No es que ahora venimos a pedirle un esfuerzo solidario a quienes no lo venían haciendo.
Por otro lado, cuidado con el tema Automotores. Porque decir que no se toca es una trampa, el disparador de la industria automotor es la base valuatoria lo prepara la DNRPA (propiedad del automotor). Es verdad, que no tocan las tablas, pero va a venir una base que como consecuencia de la devaluación todos los vehículos van a ser muchos más caros. Pueden llegar a niveles catastróficos.
A la solidaridad, o con otras palabras, se la viene invocando hace 10 años siempre para los mismos.
En la economía argentina, los salarios no están siendo actualizados por inflación. La ley de emergencia al gobierno le permite maniobrar con las jubilaciones. En ese contexto, que busca contener los efectos inflacionarios, lo que se podría plantear es por qué la provincia indexa las variables que tiene bajo su control.
Es decir, si hay un esfuerzo generalizado de la nación por intentar encauzar la economía y eso implica desenganchar la inflación de la evolución de las variables (las tarifas, el dólar, el petróleo), no tendría asidero el aumento de impuestos cuya justificación sea el impacto de la inflación que es lo que el gobierno nacional intenta evitar.
- ¿Hay un margen para no subir los impuestos? Se habla del gasto de la política por estas horas.
En el marco de un plan integral, podría evitarse esto. Que no solamente tome lo que ya implementó el gobierno nacional, sino que también tome un política antiinflacionaria y de crecimiento que todavía están ausentes. El integral debería integrar otros niveles de gobierno, esto es al revés de un enfoque integral.
En el momento en que el gobierno nacional acepta que se suspenda el Pacto Fiscal, se parece más a un "sálvese quien pueda". Lo que debería haber hecho es hacerlo bajo la condición de que las jurisdicciones no indexen los impuestos o que no se dediquen a gravar actividades dirigidas a la exportación.
En presencia de un plan integral, el aumento en la provincia pudo haberse atendido de otra manera. En su ausencia, la provincia está haciendo lo que tiene que hacer, pero con la prevención de que alguien tiene que analizar los ingresos disponibles de sus ciudadanos porque hace más de una década a los mismos le vienen aumentando arriba del promedio. No deberíamos olvidarnos del bolsillo del ciudadano, tiene un límite, no le conviene a la misma provincia.
Cuando yo cobraba impuestos mi lema era: "no quiero aumentos, lo que quiero es que se cobren bien los que ya existen". Antes de cobrar un impuesto demasiado alto, hay que darle las herramientas a Arba para que las cobrabilidades de los impuestos en lugar de ser el 68 sea del 75 y en los lugares donde hay 75 sea del 90. Porque eso sería avanzar hacia una sociedad más justa, en este caso no lo hacemos, donde los niveles de cumplimiento sigan siendo los mismos y a los contribuyentes que están registrados, le seguimos sacudiendo más duro, mientras los nieveles de informalidad están en el 40%.