Tragedia aérea: Llegaron los cuerpos a la morgue judicial donde serán sometidos a peritajes
Los restos de las 22 personas fallecidas en el accidente áreo del avión de la empresa Sol llegaron a la morgue judicial y serán sometidos a peritajes antes de ser entregados a sus familiares. Mientras tanto en el paraje Prahuaniyeu donde se produjo el accidente, continúa la investigación para conocer las causas.
Los restos de los 19 pasajeros y los 3 tripulantes que viajaban en el avión de la empresa Sol que cayera el miércoles a la noche en el paraje Prahuaniyeu llegaron a la morgue judicial donde serán sometidos a peritajes.
Una vez que la justicia termine con estos trámites entregará los restos a sus familiares para que los mismos le den el último adiós.
Mientras tanto, en territorio rionegrino, avanzan las investigaciones y pericias para determinar las causas del accidente. Ayer fue encontrada la caja negra, que será vital para desandar el camino de lo acontecido.
La hipótesis central por el momento es la del engelamiento, fenómeno que se produce por la presencia de hielo en las alas y otros sectores del fuselaje que impiden el normal funcionamiento de la aeronave. Deberá ahora investigarse porque no funcionaron los mecanismos con los que cuenta el avión para romper con el hielo, si es que finalmente se confirma que esa es la causa del accidente.
En medio del dolor se conoció la historia de una de las víctimas: Gustavo Basaldúa, un bonaerense de 35 años, gerente del Banco Credicoop de Comodoro Rivadavia en Chubut.
Gustavo era oriundo de Banfield, planeaba casarse el próximo 7 de octubre, e incluso ya tenía alquilado el salón y comprado los souvenirs para la boda con su novia, con la que vivía en esa ciudad de la Patagonia.
A los 33 años, Gustavo fue gerente de la sucursal Credicoop de Florencio Varela ubicada en sobre la avenida Sallarés de ese distrito.
Allí había cosechado un importante afecto entre los verelenses que lamentaron su muerte que enlutó la ciudad.
"Hoy un día muy triste, la tragedia del vuelo de la linea sol.. me ha llevado a un ser que conocí en esta vida, a un ser maravilloso, un joven luchador", dejó escrito en el muro del perfil de Facebook una de sus amigas en esas tierras del sur del Gran Buenos Aires.
Los mensajes se multiplicaron. Una y otra vez recordaron que "era muy gentil y habilidoso" y recordaron que "por su capacidad lo trasladaron al Sur. Que triste, era muy joven...". "Hoy el cielo te tiene allí, sin duda...".
Su mamá también expresó dolor ante las cámaras de televisión que llegaron hasta Banfield. "Es un dolor enorme, solamente los que sufrieron la pérdida de un hijo podrán entenderme. Perdí a una de las personas más maravillosas que conocí, un hijo perfecto".
Su papá recordó que "la última vez que lo vimos fue el fin de semana pasado cuando vino para formar parte de una reunión familiar. Cada vez que volaba le pedía que me llame cuando llegaba a destino, porque no me gustan nada los aviones".
Gustavo había tomado ese vuelo de Sol para poder llegar a estar presente en una reunión de trabajo.