Usurpaciones masivas: llega a su fin juicio contra líderes de una organización social
Griselda Altamirano y Jorge Lezica, pareja y principales referentes del Movimiento 1° de Octubre están acusados de liderar la toma masiva de un terreno en Tandil y el Palacio municipal de la ciudad de Azul. El 25 de febrero se conocerá el veredicto del Tribunal. Fiscalía pidió tres y dos años de prisión efectiva para cada uno de ellos.
Las usurpaciones masivas de terrenos en la provincia de Buenos Aires, por lo general, tienen dos destinos: la transformación final en un barrio urbanizado en el que cada usurpador puede, al cabo de los años, acceder a su lote; o el desalojo ordenado por la Justicia, que puede ser pacífico o con el uso de la fuerza pública.
Cuando se produce lo segundo, esa causas penales en marcha rara vez llegan a un juicio oral y a una condena para quienes están acusado de usurpar o de haber instigado la usurpación, acusación esa que suele pesar sobre referentes políticos o de organizaciones sociales.
El lunes 25 de febrero sec conocerá el veredicto del Tribunal en el juicio oral y público que enfrentan Griselda Altamirano y su pareja Jorge Lezica, principales referentes del Movimiento 1° de Octubre, acusados de liderar una toma masiva de terrenos en Tandil y la del Palacio municipal de Azul.
Tras los alegatos de defensa y fiscalía, el juez Héctor Torrens, titular del Juzgado Correccional 2, anunció que ese lunes dará a conocer si los imputados son condenados o absueltos respecto de las causas que los llevaron al banquillo.
Fueron cinco las jornadas del juicio oral y público al que fueron sometidos Altamirano y Lezica. En cada una, pasaron testigos que hicieron su aporte para establecer las responsabilidades penales que les caben en estos casos.
Los fiscales Laura Margaretic y Luis Piotti y el abogado Eduardo Carbonetti, representante de un particular damnificado, pidieron tres y dos años de prisión de efectivo cumplimiento como condena para los acusados, mientras que la defensa solicitó la absolución.
Griselda Altamiano y Jorge Lezica llegaron a juicio acusados de liderar, desde el movimeinto 1 de Octubre, la toma masiva de unos lotes ubicados en una zona de Tandil conocida como Villa Cordobita, el 11 de septiembre de 2015.
Esa toma se mantuvo hasta diciembre de ese año, cuando llegó la orden de desalojo y, con internveción policial, los ocupantes decidieron retirarse de manera voluntaria y pacífica. Pero la causa penal continuó.
La toma del Palacio municipal de Azul ocurrió el 22 de mayo de 2017 y la fiscalía consideró ese hecho como encuadrado dentro del delito de usurpación. Ese mediodía, integrantes del movimiento que lideran Altamirano y Lezica entraron al edificio y se atrincheraron hasta el otro día.
La fiscala del caso y el intendente Bertellys dialogaron con los manifestantes y lograron que, una vez más con orden de desalojo e intervención policial, en medio de forcejeos y destrozos en el edificio, depusieran su actitud y se retiraran.