Imágenes exclusivas: Así es el mayor tesoro nazi hallado en la historia en Argentina
La Noticia 1 fue el único medio de Argentina que tuvo acceso a los 75 objetos nazis secuestrados por Interpol en San Isidro y Vicente López, en lo que significó el mayor hallazgo de este tipo en toda la historia en nuestro país. La noticia tomó relevancia internacional y repercutió en los principales diarios de todo el mundo.
El hallazgo de una colección de objetos de Alemania de la época de Hitler, que se encontraron en los partidos bonaerenses de San Isidro y Vicente López, confirmó la vieja presencia nazi en la Zona Norte del Gran Buenos Aires. Tal como adelantó La Noticia 1, la investigación se inició tras la detección de obras de arte de procedencia ilícita en un local de la Estación Maipú del Tren de la Costa, en Olivos. El operativo también incluyó un allanamiento en la vivienda del comerciante en Beccar.
En total se hallaron 75 elementos con simbología nazi. Especialistas de Interpol de nuestro país trabajaron en forma conjunta con sus colegas de Alemania para determinar la originalidad de los objetos, que habrían pertenecido a Adolf Hitler y Josef Mengele. También se hallaron 48 piezas de arqueología egipcia, campanas chinos, objetos paleontológicos -entre ellos huesos de gliptodontes-, y de arqueología condorhuasi -que pertenecen a la zona de Catamarca-.
"Nuestra tarea es la prevención de tráfico ilícito de bienes culturales. Supimos que había alguien que estaba vendiendo artefactos arqueológicos que están en infracción a la ley de Protección del patrimonio arqueológico y paleontológico Nº25743 y a la ley antidiscriminatoria Nº23592. A través de nuestra línea de investigación también supimos que tenía escondido un tesoro nazi", confiaron fuentes de la investigación a La Noticia 1, que tuvo acceso a imágenes exclusivas.
El hombre de 55 años venía siendo investigado hace 9 meses por la División Patrimonio Cultural de la Interpol. En su negocio encontraron algunos objetos menores a la vista, mientras que los de mayor valor estaban escondidos en el depósito y en cuarto secreto que estaba oculto detrás de una biblioteca, en su vivienda de San Isidro. Por el momento, el comerciante no tiene pedido de captura y permanece en libertad, aguardando la resolución de la Justicia.