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La beba de 21 días fue llevada al hospital por sus padres que, dijeron que se había quedado "dormidita". Ambos fueron detenidos y se secuestraron sábanas con posibles rastros de manchas hemáticas.
Este martes, una bebé ingresó sin signos vitales en el hospital Balestrini de Ciudad Evita, partido de La Matanza. Los médicos detectaron lesiones en la zona anal de la beba de 21 días, compatibles con un abuso sexual.
Por lo que se dio intervención a la fiscal, Silvana Breggia, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1, Especializada en Conflictos Sociales que dispuso la aprehensión de los padres, quienes además tienen otros tres hijos.
Según indicaron voceros policiales, a la beba se le practicaron maniobras de reanimación cardiopulmonar en el área de neonatología, sin éxito. Posteriormente se estableció que tenía muerte cerebral, pero luego sufrió paros cardíacos y falleció.
En diálogo con el canal C5N, la directora del Hospital Alberto Belistrini, Liliana Álvarez, aseguró que la beba, identificada como Alison Barrientos Rivero, ingresó ayer por la mañana “en paro cardíaco” y que sus padres dijeron “que la encontraron dormidita”.
“En ese momento fue recibida por el cuerpo médico de la guardia de emergencias pediátricas y el equipo de neonatología. Hicieron los procedimientos para reanimar a un bebé en paro cardiorrespiratorio”, relató la médica.
“La causa de la muerte es un paro cardiorrespiratorio devenido de una falla de sus órganos que una vez que se realice la autopsia judicial sabremos el motivo del deceso final”, indicó.
Los padres de la beba, Omar Barrientes, de 24 años y Layla Melani Rivero, de 26, fueron aprehendidos en su vivienda de la calle Gavilán al 4700, del barrio San Alberto de localidad de Isidro Casanova. Efectivos de la comisaría 6ta. incautaron sábanas de la cama matrimonial con posibles rastros de manchas hemáticas.
cabe destacar que Álvarez señaló que, “en los exámenes preliminares cuando fue recibida ven algunos signos que les hace presumir un presunto abuso sexual”, y que la misma “no presentaba signos de asfixia o de ahogamiento por ingestión de líquido”, ni “hematomas o golpes en la historia clínica”.