"Vidal y Macri, el gato, terminan la obra del Arroyo El Gato", bromeó el presidente en acto en Roque Pérez
El presidente Mauricio Macri junto a la gobernadora María Eugenia Vidal supervisaron obras hidráulicas en el Río Salado en la localidad de Roque Pérez. Beneficia a los partidos desde General Belgrano al de Bragado. El mandatario aprovechó la ocasión para bromear sobre el conocido apodo con el que se burlan de él. "Vidal y Macri, el gato, terminan la obra del Arroyo El Gato, es una cosa bastante particular", dijo al referirse a otra obra inaugurada en la ciudad de La Plata.
Una serie de obras hidráulicas que se realizan sobre el río Salado, destinadas a reducir el impacto de las inundaciones, fueron supervisadas por el presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal, donde el primer mandatario aprovechó la ocasión para bromear con su apodo con el que se burlan de él.
"Vidal y Macri, el gato, terminan la obra del Arroyo El Gato, es una cosa bastante particular", dijo Macri en el acto realizado en Roque Pérez. El presidente hacía alusión a la obra en el Arroyo "El Gato" de la Ciudad de La Plata que fue finalizada e inaugurada recientemente.
El Presidente destacó que iniciativas como la obra que forma parte del Plan Maestro del Río Salado "reincorporará más de un millón de hectáreas a la producción" y llevará alivio en forma directa a 200 mil vecinos "que no van a volver a sufrir cuando ven que se larga a llover".
Por su pate Vidal que se trata de "obras que empiezan y se terminan, que son realidades concretas que hacen que la gente deje de inundarse. La gente puede ver que sus impuestos terminan donde deben terminar: en obras como estas que cambian la vida para siempre".
Además la gobernadora calificó al emprendimiento como "la obra hidráulica más importante de la provincia de Buenos Aires" y que no es sólo una herramienta para prevenir inundaciones, sino también para trabajar frente a la sequía.
Actualmente la obra atraviesa su cuarta etapa, destinada a adecuar, ensanchar y profundizar el cauce del río Salado para permitir un mejor escurrimiento del agua la cual se extiende a lo largo de 220 kilómetros, desde el partido de General Belgrano al de Bragado.