El Colegio de Médicos bonaerense solicitó la suspensión del evento "antivacunas" del Congreso Nacional
La entidad señaló que el evento organizado por una diputada del PRO resulta “tendencioso e inequitativo”, al tiempo que favorece la circulación de conceptos falsos. Se da en medio de un aumento de casos de sarampión en la provincia de Buenos Aires.
El Colegio de Médicos de la Provincia de Buenos Aires pidió la suspensión del evento antivacunas previsto para este 27 de noviembre en el Congreso de la Nación y alertó por sus efectos en la salud pública.
El acto se convocó bajo el título “¿Qué contienen realmente las vacunas COVID-19?”, organizado por la diputada del PRO (Chaco), Marilú Quiróz. “El evento está totalmente agotado”, adelantó la legisladora quien anunció que se podrá seguir por streaming.
La institución de médicos bonaerenses envió una carta al ministro de Salud, Mario Lugones en repudio al evento. El mismo, plantearon, resulta “tendencioso e inequitativo”, al tiempo que favorece la circulación de conceptos falsos.
En ese sentido, los médicos bonaerenses advirtieron que ese tipo de mensajes puede generar vacilaciones en la vacunación personal para prevenir enfermedades graves o incapacitantes.
En este marco, el titular del Colegio de Médicos, Rubén Tucci, afirmó que la proliferación de este tipo de discursos puede provocar reticencia a vacunarse o instalar dudas sobre el valor de las vacunas. Sobre este punto, el dirigente sanitario acusó que la actividad parlamentaria representa un “enorme peligro” en un contexto donde las tasas de vacunación se encuentran en niveles alarmantemente bajos.
Además, los médicos bonaerenses consideraron que un encuentro de estas características, “induce al negacionismo científico” y contradice los principios básicos de la salud pública, como la Ley Nacional de Vacunas (27.491), que reconoce a la inmunización como un bien fundamental para toda la comunidad.
En paralelo a la nota enviada a la cartera sanitaria nacional, el Colegio publicó un informe donde advirtió sobre las consecuencias de interrumpir los programas de vacunación. El documento sostuvo que la ausencia de inmunización permitiría el resurgimiento inmediato de enfermedades como poliomielitis, difteria, rubéola y tos ferina.
Frente a este diagnóstico, la entidad médica advirtió por la reaparición de enfermedades controladas durante décadas y mencionó casos como sarampión, tos convulsa y hepatitis A. El Colegio sostuvo que la reaparición de estos agentes se vincula de manera directa con la caída en la inmunización y reiteró que la jornada en el Congreso de la Nación podría empeorar el escenario.
En ese sentido, el texto explicó que la pérdida de inmunidad colectiva dejaría expuestos a bebés, personas inmunocomprometidas y grupos que no desarrollan una respuesta adecuada a las vacunas, lo que provocaría un aumento drástico de hospitalizaciones y un impacto directo sobre la capacidad del sistema de salud.
Por último, el informe también detalló los efectos sociales y económicos de un retroceso sanitario como el cierre de escuelas, restricciones de viaje y caída del turismo como principales indicadores. Por caso, el Colegio llamó a reforzar los esquemas de vacunación y abogó por la responsabilidad social en un contexto de ajuste sanitario a nivel nacional.
Comunicado completo:
En una carta dirigida al Ministro de Salud de la Nación, Dr. Mario Lugones, el Colegio de Médicos de la Provincia de Buenos Aires solicitó la suspensión del evento a realizarse el próximo 27 de noviembre en el Congreso de la Nación, bajo el título : “¿Qué contienen realmente las vacunas COVID-19? Perspectivas legales, políticas, económicas, genéticas e infectológicas”.
En la misiva que lleva la firma del presidente de nuestra entidad, Dr. Rubén Tucci, se sostiene que el evento en cuestión, desde su enunciado inicial, “puede provocar reticencia a vacunarse en la comunidad, o generar dudas respecto al valor de las vacunas; lo que resulta de enorme peligro, sobre todo en momentos en los que encontramos tasas de vacunación alarmantemente bajas, enfermedades que habiendo estado absolutamente controladas luego de la introducción de las vacunas, están re-emergiendo como problemas sanitarios de peso (vg. sarampión, tos convulsa, Hepatitis A etc.)”.
Asimismo, al tiempo de considerar que avalar este tipo de jornadas en el ámbito del Congreso de la Nación “induce al negacionismo científico”, desde el Colegio de Médicos se consideró “que resulta imperioso continuar con el compromiso de nuestro país con la Salud Pública, reconociendo a las vacunas como bien fundamental para la comunidad, conforme lo garantiza la Ley de Vacunas (Ley 27.491).
En este marco, en la carta dirigida a al Ministro de Salud de la Nación, se manifestó el rechazo de la entidad a “la realización de este evento por resultar tendencioso, inequitativo, y favorable a generar y reproducir falsos conceptos, con el riesgo de inducir vacilaciones en la comunidad a la hora de decidir la vacunación personal para prevenir enfermedades que pueden ser mortales, o incapacitantes”.
Alerta a la población sobre las gravísimas consecuencias sanitarias que desencadenaría la falta de vacunación
La vacunación constituye la Estrategia fundamental en prevención de enfermedades.
Las consecuencias de dejar de vacunar a la población serían catastróficas y se manifestarían rápidamente a nivel global, revirtiendo décadas de avances en salud pública. Esto generaría una crisis de salud sin precedentes.
Resurgimiento y Brotes Epidémicos
La consecuencia más inmediata y dramática sería el resurgimiento masivo de enfermedades que actualmente están bajo control o casi erradicadas.
● Enfermedades Inmunoprevenibles: Patologías como la poliomielitis, el sarampión, la difteria, la tos ferina (pertussis) y la rubéola volverían a circular a niveles epidémicos. Estas enfermedades son altamente contagiosas, especialmente el sarampión.
● Pérdida de Inmunidad Colectiva (Inmunidad de Rebaño): La vacunación protege no solo al individuo, sino también a la comunidad (inmunidad colectiva). Al cesar la vacunación, esta protección desaparecería, dejando vulnerables a bebés demasiado pequeños para ser vacunados, personas con sistemas inmunitarios comprometidos y aquellos que no respondieron a la vacuna. Esto aceleraría la propagación.
Aumento Exponencial de la Morbilidad y Mortalidad
La reaparición de estas enfermedades resultaría en un aumento brutal de los casos, hospitalizaciones y muertes.
● Morbilidad Severa: Veríamos un incremento de complicaciones graves y secuelas permanentes. Por ejemplo, la poliomielitis llevaría a la parálisis, el sarampión a la encefalitis o neumonía grave, y la rubéola congénita a defectos de nacimiento devastadores.
● Mortalidad Infantil y de Adultos: Las tasas de mortalidad infantil, que han disminuido drásticamente gracias a las vacunas, se dispararían, especialmente en países de ingresos bajos y medios, pero afectaría a todas las regiones. Los adultos también correrían riesgo de muerte por enfermedades como la difteria o el tétanos.
Colapso de los Sistemas de Salud
Los sistemas sanitarios de todo el mundo, incluso los más robustos, no podrían soportar la carga.
● Saturación Hospitalaria: La afluencia de pacientes graves con enfermedades prevenibles agotaría los recursos (camas, equipos, personal, Unidades de Cuidados Intensivos). Esto desviaría recursos vitales de otras áreas, como el tratamiento del cáncer, cirugías de emergencia y la atención a enfermedades crónicas.
● Agotamiento de Personal: El personal sanitario se vería sobrepasado, con un alto riesgo de infección y agotamiento, impactando negativamente la calidad de la atención general.
Impacto Socioeconómico Global
Las consecuencias irían mucho más allá de las salas de hospital.
● Interrupción Educativa: Brotes de enfermedades contagiosas obligarían al cierre de escuelas, afectando la educación de millones de niños y la fuerza laboral de los padres.
● Aislamiento y Restricciones de Viaje: Las naciones con altas tasas de brotes serían aisladas, imponiéndose severas restricciones de viaje y comercio, lo que impactaría el turismo y las economías globales.
● Costos Desorbitados: El gasto en el tratamiento de estas enfermedades, las bajas laborales, la pérdida de productividad y la respuesta a las epidemias superarían con creces el costo de los programas de vacunación preventiva.
Peligro de Nuevas Pandemias y Resistencia Antimicrobiana
Dejar de vacunar también tendría efectos secundarios peligrosos.
● Emergencia de Cepa Virales: A mayor circulación de un virus (como la influenza o el COVID-19 si las vacunas específicas se abandonan), mayor es la oportunidad de que mute y surjan nuevas variantes o cepas con mayor virulencia o capacidad de evasión inmunitaria, aumentando el riesgo de futuras pandemias.
● Aumento de Resistencia a Antibióticos: Con más infecciones bacterianas (como la neumonía) o infecciones virales que derivan en complicaciones bacterianas, se dispararía el uso inadecuado de antibióticos, acelerando la ya grave crisis de la resistencia a los antimicrobianos (RAM).
En resumen, dejar de vacunar a la población mundial significaría un retroceso a la era pre-vacunal, donde la muerte y la discapacidad por enfermedades infecciosas eran una realidad cotidiana, desmantelando la arquitectura de la salud pública global. Sería una catástrofe humanitaria y de desarrollo socio económico.
:format(webp):quality(40)/https://lanoticia1cdn.eleco.com.ar/media/2025/10/congreso_de_la_nacion_durante_el_debate_del_presupuesto_2026.jpeg)
Para comentar, debés estar registradoPor favor, iniciá sesión