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La ordenanza municipal que estableció la Zona Roja debería comenzar a regir en cinco días. Es un espacio ubicado sobre la avenida 10 de febrero de 400 metros. Las trabajadoras sexuales se niegan porque quieren un espacio más cercano al centro y los vecinos también se oponen.
Las trabajadoras sexuales se oponen al nuevo espacio destinado como Zona Roja en Mar del Plata y pidieron una reunión con el jefe comunal Guillermo Montenegro. Los vecinos próximos a la zona también se niegan.
“No vamos a ir porque básicamente es ir a la muerte. Por eso pedimos una reunión con Montenegro porque lo que va a pasar es que las trabajadoras van a desconocer la ordenanza”, señaló Victoria Disalvo, de la Red por el Reconocimiento del Trabajo Sexual, a La Capital.
Las organizaciones que nuclean a las trabajadoras pedirán que se modifique la zona elegida y se designe un lugar más cerca del centro.
Tanto las trabajadoras como los vecinos anticiparon que harán una conferencia de prensa este martes para exponer su posición.