Qué hay detrás de las protestas de los trabajadores de Tatsa, empresa de los Cirigliano
Tecnologia Avanzada en Transporte es una empresa dedicada a la fabricación de micros. Al igual que Emfer, pertenece a los hermanos Cirigliano, uno de los grupos económicos más poderosos del país, al que tras la tragedia de Once Cristina le quitó la concesión de TBA. Sin embargo, mantienen el negocio del arreglo de vagones; son dueños de los micros que pone el Estado cuando hay paro de trenes; proveen netbooks para el Plan Conectar Igualdad y decodificadores para la TDA. Los empleados denuncian despidos y persecución a delegados.
Los trabajadores de la empresa Tatsa atraviesan un serio conflicto laboral en el marco de una serie de despidos. El pasado lunes 2 de septiembre, los empleados cortaron la Avenida General Paz, a la altura de la Estación Migueletes, en rechazo al despido de compañeros. Siguiendo la línea de protestas, este martes tomaron la terminal de la fábrica de colectivos.
La Noticia 1 dialogó con el delegado de los trabajadores, Adrián Escalante, quien indicó que la manifestación se debe al despido de 13 empleados por parte de la compañía autopartista. En ese sentido, explicó que "el lunes, el Ministerio de Trabajo salió en contra de los trabajadores" y agregó que el corte "es la única manera de que escuchen el reclamo".
En declaraciones a este portal, Escalante sostuvo que los conflictos comenzaron tras la tragedia de Once, cuando el Gobierno le quitó la concesión a la empresa y comenzó una marcada merma en la producción. "Primero dijeron que no había trabajo porque empresa atravesaba una crisis preventiva y tenían que cerrar la planta. Ahora resulta que no cierran nada pero despiden a los compañeros", expresó.
La Noticia 1 también habló con Roberto Gómez, quien además denunció una persecución contra los delegados: "Desde que comenzamos a plantear una solución al conflicto estamos siendo amenazados". "Varios compañeros tenemos una causa penal por una toma de portones", precisó el gremialista de la UOM, sindicato que conduce el líder de la CGT ofialista Antonio Caló, investigado por un fraude millonario.
Cabe remarcar que Tecnologia Avanzada en Transporte (Tatsa) es una empresa dedicada a la fabricación, comercialización y venta de buses, carrocerias de camiones, buses híbridos y carrocerías de autobús. La compañía pertenece a los hermanos Claudio Sergio y Mario Antonio Cirigliano, uno de los grupos económicos más poderosos que existen dentro del país.
A raíz de la tragedia de Once, que dejó 51 muertos y más de 700 heridos, Cristina Fernández le quitó a los Cirigliano la concesión de TBA, sin embargo mantuvo los negocios con EmFer, otra firma de esos empresarios que se dedica a la reparación de material rodante siniestrado, a la que el Estado pagó de 1 a 4 millones de pesos para restaurar cada vagón de la Línea Sarmiento.
Además, otra tragedia ocurrida este año desnudó otra realidad que genera polémica en la opinión pública. Tras el choque de trenes en Castelar, que dejó otro saldo de 3 muertos y 315 heridos, el periodista Jonatan Viale denunció en radio La Red que los micros que dispuso el Gobierno para el traslado de pasajeros desde Once a Moreno por la interrupción del servicio ferroviario, también pertenecen a Tatsa.
Desde que ocurrieron las tragedias de Once y Castelar, la situación de los trabajadores de ambas empresas se fue agravando cada vez más, debido a la disminución en la producción de ambas plantas. El conflicto generó más de un dolor de cabeza para el Gobierno Nacional, principal socio de las empresas de los Cirigliano, hoy procesados junto al exsecretario de Transporte, Ricardo Jaime.